Entre sus ventajas destaca la privacidad: al no requerir servidores externos, puedes mantener tus datos dentro de tu red o infraestructura. Además, su rendimiento es notablemente fluido incluso en conexiones de baja latencia, y su interfaz es sencilla tanto para usuarios técnicos como para quienes solo necesitan soporte remoto ocasional. También ofrece funciones como transferencia de archivos, control total del escritorio y compatibilidad entre sistemas operativos (Windows, Linux, macOS, Android e iOS).
El interfaz de RustDesk es muy similar al de AnyDesk, asi que si sabes usar esta última, no deberías tener ningún problema con RustDesk.
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| El interfaz de RustDesk es muy similar al de Anydesk |
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| Conexión escritorio remoto entre Linux Mint y Linux Lite |
Como es habitual en todos este tipo de programas, el usuario que "recibe" la conexión tiene que dar permiso a la misma y así mismo tiene que dar permiso a las opciones de transferencia de archivos, acceder a la webcam o al portapapeles.
Sin embargo, aunque RustDesk es potente, su configuración de servidor propio puede resultar compleja para usuarios sin experiencia en redes o administración de sistemas.
Además, al ser un proyecto en desarrollo activo, algunas funciones avanzadas pueden no estar tan pulidas como en soluciones comerciales.





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